Uno de los hechos que marca nuestras vidas es el de viajar. Si bien es cierto, como el adagio lo dice que hay cosas que debemos hacer en nuestra vida como plantar un árbol, tener un hijo o escribir un libro, emprender la tarea de viajar es algo que también debe ser tenido en consideración. El trasegar consigo mismo tiene experiencias únicas e inolvidables, como conocer nuevas culturas entrando en contacto con un mundo nuevo rico e inédito ante nuestros ojos.
La razón más importante para escribir una bitácora del viaje es la gran importancia de inmortalizar esos hechos para que queden en la memoria, que muchas veces con el pasar del tiempo se dejan de retener. Son muy vívidos los recuerdos y las experiencias aleccionadoras desde el momento en que el avión echa vuelo.
Hay algunos escritos que cuando se leen, producen en el corazón la sensación de que el lector lo vivió y lo escribió. La riqueza de la crónica de viaje, consiste en relatar de la manera más fidedigna esos hechos que en singularidad se convierten en inmortales. Desde siempre el ser humano ha querido dejar la huella de sus acciones y empresas.
La obra se podría dividir por orden cronológico desde los primeros pasos, como se dio el viaje, las primeras experiencias en una ciudad como Londres, un consejo para los nuevos viajeros y a partir de ello se prepara al lector para comprender las experiencias personales del autor. La estructura narrativa es cronólogica, pues viene en estructura de tiempo. También hay descripciones de sitios y experiencias por medio de poemas y versos. La última parte comprende una conclusión sobre lo escrito y una lista de los lugares más interesantes para visitar en la capital británica.
Agradeciendo también a los lectores de estas notas del viaje sus comentarios, sugerencias y opiniones dentro del mismo o dirigiéndose al correo electrónico: humbertoperiodismo@gmail.com o número de contacto en Colombia (0057) 3163484828.
Gracias y espero lo disfruten.
